LA MUERTE DEL CAPITAL Y LA ESTATIFICACION DE LA BANCA
LAS GUERRAS DEL PRESIDENTE

Alexander Guerrero E (*)


1. La anunciada muerte del capital……..

La medicina era dulce al principio y amarga al final, la banca sabe administrarse entre lo dulce y lo amargo. Los banqueros debieron saberlo, que en un régimen sin estado de derecho, y sin marco jurídico que protegiera derechos de propiedad, debió haber tomado anticuerpos para combatir el empalago que producían los reales del petróleo y la deuda pública, transados e intermediados por la banca privada, los bancos obtuvieron grandes ganancias, era lógico.
La opinión pública lo debe recordar, y los banqueros aun más porque la banca desde tiempos remotos de su surgimiento en el Medievo sufre no solo de debilidad jurídica, sino hasta teológica, e ideológicamente en el socialismo la banca es considerada una actividad cuasi-pecaminosa. Deben leer “las tesis económicas” del Che Guevara muy populares en Miraflores desde hace años, pero la gente juega al yo no sé nada y no quisieron ver la sombra del comunismo como régimen de poder social detrás de las palabras y el a veces candor simulado de las palabras del Líder.

2. …….incluido el financiero, la banca, nadie se salvara!

Pero en la transición al socialismo todos necesitan como al médico, a un banquero. Los bancos ganaron mucho real en momentos en que los precios del petróleo emborrachaban a ministros y otros funcionarios públicos que corrían alegres a depositar en los bancos, intereses y plazos contra comisiones era el juego. Algo “normal” en muchas décadas, solo que esta vez, los objetivos revolucionarios de muerte al capital no podrían ser divisados en virtud de la acostumbrada miopía que distingue los negocios en las finanzas. En el corto plazo, había que ganar tanto dinero como sea posible y ellos es totalmente razonable.
Cuando veíamos el espectáculo público de la AB “absorber” la defenestración del Federal, uno que conoce esos mundos pensaba, sale de circulación un competidor que durante anos jugo duro, muchos bancos criticaban abiertamente los grandes rendimientos de algunos instrumentos financieros producidos por los depósitos del gobierno.

3. …….y por ello las razones políticas privan así se escandan detrás de un crucifijo

La gente duda en torno a las razones de la liquidación del Federal, las políticas, no solo por la presencia de Globovision, son demasiado protuberantes como para ser arrojadas por la borda con pose y sonrisa. Ese espectáculo que veíamos en la pantalla era desde luego deprimente. Una semana antes el Presidente decía en su show semanal que la banca era totalmente dependiente del gobierno (Chávez sic); el viernes siguiente en la mañana se supo que el Federal estaba fuera de cámara, no tenia plata para pagar cheques.
Pero también era evidente que la oportunidad la pintan calva y el gobierno con ese factor en sus manos, y con la política en la calle de acabar el capitalismo, la liquidación del Federal era obvio es parte de la esa lucha contra el capital. No pensaran los directivos de la AB que la cosa no es con ellos. La banca venezolana está en el corazón del capitalismo criollo, es una historia de más de un siglo que no se puede esconder, y al menos que sea genéticamente ingenuo, a lo Uslar, en la guerra contra el capital está la agenda de estatificación de la banca.
Mientras tanto el gobierno creaba su red de bancos; la compra del Banco Venezuela y la creación del Bicentenario allí están y no para adorno. Así mismo se creaban otros mecanismos financieros no tan ortodoxos para que la caída de cada banco no recibiera el consabido costo fiscal que ello significa, el gobierno como cualquier otro tiene pánico de una crisis financiera, por ello la revolución va “case by case” a cero costo para el gobierno, FOGADE y el BCV se encargaran de imprimir los reales que se requieran para pagar a los depositantes, y la inflación se encargara de redistribuir el impacto negativo de esas perversiones monetarias. Pero hay otros incentivos también.

4. Los incentivos para la estatificación de la banca

La parte amarga era entonces un dato, en muchas oportunidades lo acotábamos en nuestro trabajo de asesoría en el mercado financiero, porque cuando el gobierno enfrentara dificultades fiscales por caída del ingreso fiscal petrolero, el impacto vendría completo contra los bancos, y este impacto vendría acompañado de la violencia política que trae la lucha contra el capitalismo. De hecho en estos últimos 8 anos, el gobierno y sus poderes han vendió amarando las manos de los banqueros, regulación tras restricción aparecen a diario en SUDEBAN, y reformas a la ley de bancos por montones y a cada rato, y con ellos el discurso tipo paredón del Presidente contra el capitalismo y contra los bancos.
Así tenemos que en los actuales momentos los indicadores financieros dicen que se acabaron los días de las ganancias, la realidad es absolutamente otra, y que el control de cambio nos evita que tengamos otra crisis como la del 95, la economía Venezolana está bajo una contracción económica severa y de donde no se saldrá por el socialismo, que por el contrario nos lleva de frente a la ruina global. Pero había que operar a sabiendas que al final estaba colocado un patíbulo bancario.
Así, todos decidieron tomarse la medicina y comerse primero el postre, y de alguna manera violar algunas reglas del sentido común en el funcionamiento de la banca: no depender de un solo depositante, sobre todo cuando ese depositante tiene discrecionalmente el poder sobre los otros poderes, es decir, sin estado de derecho, sobre todo si los incentivos de este cliente muy especial, el Estado/gobierno son de naturaleza fiscal, algo que sabemos por definición, ya que hará todo cuanto le sea posible por disminuir sus obligaciones fiscales producidas por enorme endeudamiento público, después de todo la política vive en una relación que es siempre de caja, y desde luego de corto, cortísimo plazo.

5. La lucha de clases y la muerte del capital “financiero”

Un conocido ortodoxo marxista del gobierno, un célebre ministro, (no es economista ni siquiera aficionado) que ha estado en el gobierno desde el mismo inicio hace 11 anos, y que frente a sus narices exploto el transformador eléctrico que colapso al sistema eléctrico público podrá confirmar que el capitalismo financiero (casas de bolsa, intermediadores, especuladores seguros y bancos), como el que produce alimentos son enemigos de la revolución a vencer de inmediato.
El gobierno tiene en los bancos Venezolanos privados, nacionales y extranjeros unos 15 mil millones de dólares en bonos denominados n bolívares de la deuda pública nacional así como una buena porción de otr4os cinco mil millones de la deuda pública –externa- denominada en dólares. Además de esos unos cuantos miles de millones de bolívares en depósitos del Estado. Estos números son lo que subyacen a las palabras del Presidente Chávez que la banca depende del Estado -Chávez (sic).
Pero hay otros “factores” en manos del gobierno, la regulación y la supervisión, no es difícil entonces para el gobierno conocer el grado de dependencia de los bancos frente al Estado. La intervención del Federal y otros bancos a finales del 2009 y su liquidación como instituciones financieras refleja esa gradiente de dependencia.
Los demás lo pone la política y la rueda de la revolución sobre todo en el entremés del bocado que viene envuelto en ideología de lucha de clases impuesto en los últimos meses por el Presidente y que constituye la “razón” del hecho, porque a la oligarquía, burguesía y ricos hay que acabarlos, y los bancos son propiedades de esa oligarquía y burguesía, de manera que no pasaran ¡!; gritan los comunistas. Pero no debe olvidarse que el incentivo central además del contenido en la lucha de clases, es el fiscal, los reales, para pagar las necesidades de la sociedad de carencias y escasez en que la revolución ha convertido a Venezuela en estos años.

6. El incentivo fiscal para estatificar a la banca

Veamos un ejemplo. Al intervenir FOGADE al Banco Federal le encuentra este en su cartera de activos un volumen determinado de deuda pública en forma de bonos que son para el gobierno un pasivo, para el banco –intervenido- un activo. Su liquidación produce un “neteo” de activos y pasivos y así esa porción de deuda pública desparece.
El gobierno así se encuentra con que debe redistribuir los clientes de esos bancos intervenidos y liquidados entre los bancos privados restantes y los públicos, o quizás solo lo para los públicos, dado que son los depósitos del público, sus dineros, son lo que los bancos –públicos y privados- utilizan para comprar los bonos de deuda pública. Así el "neteo" de pasivos del gobierno (deuda pública) y activos de la banca intervenida por FOGADE “eliminaría” de un plumazo interventor esa deuda pública, o una gran optarte de ella.
Al reducirse entonces la deuda pública por virtud de ese proceso de estatificación –por efecto o defecto- surgirían como es evidente nuevas fuentes de endeudamiento público, casi como si la maquinita del BCV produjera bolívares para pagar el gasto público. Muy similar a ello, porque en cualquier momento – y en virtud de la actual tendencia- en virtud del deterioro en los ingresos fiscales y en las reservas internacionales se mantenga, no solo por efecto de la descapitalización de la economía por acción revolucionaria, sino del manejo inadecuado e improvisado de la política económica, la deuda pública la tendría que comprar el BCV, y pagarla con la impresora de dinero de la Casa de la Moneda.

7. La sociedad de escasez y carencias

El desiderátum de estas aventuras y experimentos socioeconómicos que nos muestra la revolución, es una combinación de inflación, escasez y precios relativos pervertidos que tendrán su expresión en la aparición de mercados informales para la distribución de los bienes esenciales.
EL derroche fiscal, y económico con los elevados volúmenes de alimentos descompuestos por manejo, adulteración, corrupción, ineficiencia y el juego de maffias redistribuidoras dentro del mismo Estado y sus empresas y grupos de intereses corporativos –agrupaciones políticas, mercantiles y militares etc.- ya es parte de este fenómeno de la construcción de una sociedad de carencias y escasez.
La inflación y la escasez son apenas los dos epifenómenos que muestran un sistema económico como el socialismo absolutamente inservible y demoledor de los derechos y libertades de la gente, comenzando por los derechos económicos de propiedad y libertad de empresa, hoy perseguidos por la revolución, y convertidos en el discurso políticos en enemigos del pueblo, en realidad, sus enemigos están en el gobierno, y en su agenda destructiva del trabajo (capital humano) y el capital.
Alguien que le diga al Presidente que la destrucción del capital implica la destrucción del trabajo (capital humano). Aunque pienso que lo sabe porque la destrucción del trabajo le deja miles de individuos dispuestos a formar la cola de la mendicidad del socialismo, colectivos serviles del Estado pendiente del aparato redistributivo tanto en dinero como en especies –alimentos, si estén piches.

(*) Economista, Ph.D (London)
Caracas, Venezuela
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